La estrategia militar romana

Para enfrentarse al enemigo, el ejército romano debía recorrer, a veces, largas distancias. En cada etapa hacía unos 25 km, en los que el soldado llevaba una mochilade, aproximadamente, 25 kg de peso con efectos personales, instrumentos para la guerra y víveres para unas dos semanas.

• El campamento romano

Al final de cada etapa los romanos establecían el campamento, temporal o permanente, si la tropa debía de permanecer allí mucho tiempo.

En la época imperial, muchos campamentos permanentes se convirtieron en núcleos de población urbana y origen de nuevas ciudades, y desempeñaron un gran papel en la romanización de las provincias.

- El trazado del campamento

El campamento se levantaba en una zona con agua y pastos. Allí se trazaba un recinto rectangular que se cerraba con una empalizada y se rodeaba con un foso y un terraplén. EN el interior se levantaban las tiendas y en el centro del campamento se reservaba un lugar para los mandos.

En los campamentos siempre había unos jefes de ingenieros, que dirigían a los soldados para que se realizaran trabajos de fortificación e ingeniería, como puentes, calzadas y acueductos.

 - La vida del campamento 

La vida del soldado era dura y disciplinada. EL que no cumplía el reglamento podía ser castigado con la privación del sueldo, la degradación, la flagelación e, incluso, la pena de muerte.

Por el contrario, el comportamiento destacado era premiado por menciones honoríficas, y medallas, y , si se ocupaba un alto cargo, con la entrada triunfal en Roma en un gran desfile.

• El asedio a las ciudades

Para atacar al ejército enemigo y asediar sus ciudades, los romanos emplearon artilugios o máquinas de guerra.

· Torres de madera, más altas que las murallas que rodeaban la ciudad sitiada, desde las que disparaban al enemigo.

· Ballesas y catapultas, que servían para arrojar flechas, piedras, barriles incendiarios, etc.

·Arietes, que eran una especie de vigas muy pesadas con las que golpeaba la puerta de la ciudad hasta conseguir abrir brecha.

Después, los soldados penetraban en la ciudad asediada en formación compacta; avanzaban pegados y se cubrían unos a otros solapando sus escudos y dando las sensación de ser, cada uno de ellos, la escama del caparazón de una tortuga; de ahí su nombre: testudo, "tortuga" en latín.

Tácticas romanas